"En el camino del amor divino nunca se puede decir «Basta»".
P.Pio de Pietralcina

Nuestra procesión persigue una clara finalidad y no es otra que la de meditar la Pasión de Jesús siguiendo sus Palabras en la Cruz. Por ello durante el recorrido, en siete paradas programadas, se reza el Sermón de las Siete Palabras.

Primera Palabra.
«Padre, perdónalos porque no saben lo que hacen» (Lucas 23,34).
Iglesia Santa Isabel.

Segunda Palabra.
«De cierto te digo hoy, estarás conmigo en el paraíso» (Lucas 23,23-43).
Iglesia de Santa Rita. Callejón de Santa Úrsula.

Tercera Palabra.
«Mujer, he ahí a tu hijo; hijo he ahí a tu madre » (Juan 19,26 s.).
Plaza de San Salvador.

Cuarta Palabra.
«Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado?» (Mt 27,46; Mt 15,34).
Iglesia de San Clemente.

Quinta Palabra.
«Tengo sed» (Jn 19,28).
Plaza de Santo Domingo el Antiguo.

Sexta Palabra.
«Todo está consumado» (Juan 19,30).
Plaza Santo Domingo el Real.

Séptima Palabra.
«Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu, mi alma y mi cuerpo» (Lucas 23,46).
Plaza de San Vicente.


Aspectos curiosos.

A la salida del convento de Santa Isabel, alumnos del Seminario Mayor entonan el cántico Miserere Mei, obra de Juan José Calvo Martínez.

Por la dificultad que entraña ante las dimensiones de la Cruz, muy especial resulta el paso por el cobertizo de Santo Domingo el Real ya que los costaleros tienen que bajar la Imagen de las andas y portarla directamente a hombros.

El encuentro del Cristo del Amor con el Cristo de los Ángeles en la Plaza de San Vicente. Ambas cofradías rezan juntas la séptima estación del Sermón de las Siete Palabras que ambas realizan en sus recorridos procesionales.

Ante la puerta de la Catedral los hermanos realizan una oración final.

En las estaciones del Sermón, tras las oraciones, entona cánticos religiosos el Coro.